El colectivo de derechos humanos advirtió que el carácter punitivo de la reforma planteada por el Ejecutivo contra las manifestaciones pone en riesgo la democracia.
Las Abuelas de Plaza de Mayo repudiaron este jueves la ‘Ley de bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos’ –’ley ómnibus’– entregada la víspera en el Congreso por el Gobierno del presidente Javier Milei, al considerar que pretende “una transformación estructural del Estado, concentrando todo el poder en el Ejecutivo” bajo un enfoque abiertamente represivo.
En un comunicado, el colectivo de derechos humanos apuntó que “el texto presentado dedica particular atención a criminalizar la protesta social y utiliza la definición de legítima defensa’ para flexibilizar el gatillo fácil y la mano dura de las fuerzas de seguridad”. Asimismo, “agrava las penas” impuestas a quienes decidan protestar en las calles o a quienes convoquen u organicen una manifestación, al incluir en esta categoría “a cualquier congregación intencional y temporal de tres o más personas”.
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Las Abuelas llamaron la atención sobre la recuperación de la figura de “obediencia debida“, esgrimida por los perpetradores de violaciones de los derechos humanos durante la última dictadura militar, pues establece que “la proporcionalidad del medio empleado debe ser siempre interpretada en favor de la fuerza de seguridad”.
Del mismo modo, advirtieron que “el proyecto pretende una transformación de todas las atribuciones del Estado –penal, tributaria, económica, educativa, cultural, social, previsional, entre otras–, y avasalla los derechos de los y las argentinas“, razón por la cual consideraron que “la democracia está en riesgo” y llamaron “a la dirigencia de todo el arco político, a la justicia, a las organizaciones de la sociedad civil, a la ciudadanía en su conjunto”, a ejercer la responsabilidad de defenderla.