Durante el ataque se utilizaron explosivos de gran potencia y un guardia que estaba de servicio perdió la vida.

Al menos 600 reclusos se fugaron este 5 de julio de una prisión de máxima seguridad en Abuya, la capital de Nigeria, tras un ataque a las instalaciones que las autoridades atribuyen a rebeldes extremistas islámicos. Del total de presos fugados, unos 300 fueron recapturados poco después. 

Shuaib Belgore, secretario permanente del Ministerio del Interior, declaró que durante el ataque se utilizaron “explosivos de mucha potencia” y que un guardia que estaba de servicio perdió la vida.

Desde hace más de una década los extremistas islámicos que atacaron el recinto libran una insurgencia en el noreste del país. Según responsables penitenciario, el asalto al centro de detención dejó en libertad a muchos miembros del grupo que cumplían condenas allí.

Policía nigeriana rescata a 77 personas que fueron retenidas durante meses en una iglesia en espera de la "segunda venida" de Jesucristo

Policía nigeriana rescata a 77 personas que fueron retenidas durante meses en una iglesia en espera de la “segunda venida” de Jesucristo

Los rebeldes yihadistas nigerianos habían protagonizado varias fugas en centros penitenciarios del país en los últimos años, pero esta es la primera en la capital. “Entendemos que son [del grupo fundamentalista islámico] Boko Haram. Vinieron específicamente a por sus coconspiradores”, dijo Belgore. 

La ONU estima que la insurgencia extremista nigeriana que libran Boko Haram y una división conocida como Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, por sus siglas en inglés) ha dejado más de 35.000 muertos y más de dos millones de desplazados. Mientras tanto, la prolongada inestabilidad, el hambre y la falta de servicios de salud a causa de las acciones de los rebeldes han provocado indirectamente otras 300.000 muertes.

Comparte la Noticia: