El hallazgo fue realizado cerca de restos de un pariente evolutivo cercano de los primeros humanos.
Un equipo de antropólogos liderado por investigadores del Museo Nacional de Historia Natural del Instituto Smithsonian ha revelado que un pariente evolutivo cercano de los primeros humanos usaba unas herramientas de piedra únicas, datadas de hace unos 3 millones de años, tanto para descuartizar grandes animales como para triturar productos vegetales, creando una nueva incógnita sobre quien fabricó las primeras herramientas de la humanidad.
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En el estudio, publicado en la revista Science, se explica que las herramientas descubiertas a orillas del lago Victoria, en Kenia, se atribuyen por lo general a especies del género humano ‘Homo’; no obstante, las excavaciones revelaron otro hallazgo, dos dientes molares que pertenecen a especies de ‘Paranthropus’, sugiriendo que este género las pudo haber fabricado y/o usado.
Mediante el análisis del desgaste en los instrumentos de piedra y los huesos de animales, tales como hipopótamos y bóvidos, descubiertos en el lugar de las excavaciones, los investigadores concluyeron que estas herramientas fueron utilizadas por los primeros ancestros humanos para procesar una amplia gama de materiales y alimentos, incluyendo plantas, carne y médulas óseas.
En ese sentido, señalan que el hecho de que estas herramientas estén relacionadas con ‘Paranthropus’ motiva a repensar las capacidades de estos enigmáticos homínidos y abre una “intriga fascinante” sobre cuál fue la primera especie que logró elaborarlas y planificar su utilización, dado que se pensaba que los miembros de la especie ‘Homo’ fueron los primeros en usar este tipo de tecnología.
Las herramientas fueron descubiertas a más de 1.200 kilómetros de donde se hallaron las herramientas de piedra más primitivas fabricadas de manera sistemática del estilo olduvayense (nombre que proviene del importante yacimiento de la garganta de Olduvai, en Tanzania), que datan de aproximadamente 2,6 millones de años.
Sin embargo, no las habían podido vincular a ninguna función en particular. En ese contexto, los expertos destacan la relevancia de este nuevo descubrimiento, no solo por el hallazgo en sí, sino también por su significado histórico.