Azua, RD.- El médico forense que resultó involucrado en un accidente ocurrido el pasado domingo donde murieron padre e hija, ofreció su versión en torno a las acusaciones hechas en su contra.

Fidencio M. Pérez Ogando, dijo que ni siquiera era él que venía manejando, sino que le pidió a su acompañante Luís Castillo que le ayudara un rato, no imaginando que sucedería el trágico suceso.

Aseguró que él se hizo responsable del accidente porque el vehículo era suyo y debido a que el conductor sufrió dos traumas: sicológico y físico, teniendo que ser llevado del lugar para asistirlo. 

Enfatizó en que las personas que murieron en el hecho fueron los que le impactaron y que aunque lamenta profundamente lo sucedido, él nunca se había visto involucrado en ningún accidente. Insistió en que existen testigos de que los hechos acontecieron tal y como lo está contando. 

Mencionó que ha viajado constantemente desde Santo Domingo a Las Matas de Farfán porque sus padres viven allá, y que duró mucho tiempo realizando labores en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses, INACIF, en Azua, pero que siempre ha manejado con precaución. 

Expresó Fidencio que a él le fue impuesta una garantía económica de 500 mil pesos, pero que al final lo que más le importa es limpiar su reputación.

El accidente por el que había sido apresado el médico, ocurrió en el kilómetro veinte de la carretera Sánchez próximo a la comunidad Las Guanábanas, donde perdieron la vida Fernando Báez y su hija de 17 años Darleny Báez, quienes viajaban en una motocicleta tipo “Jumbo”, ambos residentes en el sector Quisqueya 1, provincia Azua.

Comparte la Noticia: