Washington elogió a las autoridades de la isla por negarse a permitir que los aviones rusos que transportaban carga y pasajeros a Venezuela usen su espacio aéreo
El Gobierno de Malta negó el permiso de pasar por su espacio aéreo a dos aviones rusos en su camino a Venezuela. Según explicó la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, el 4 de abril, Rusia solicitó con anticipación dicho permiso para dos aeronaves que transportaban carga y pasajeros a Caracas.
“Desafortunadamente, […] sin explicar las razones, las autoridades maltesas se negaron a emitir un permiso para el paso de los aviones rusos”, detalló la funcionaria.
La flamante vocera del Departamento de Estado de EE.UU., Morgan Ortagus, ‘aplaudió’ a través de su cuenta de Twitter a las autoridades de la isla mediterránea “por negarse a permitir que los aviones rusos usen su espacio aéreo para suministrar” a Venezuela. Además, la portavoz pidió a todos los países “seguir el ejemplo de Malta para detener el apoyo del Kremlin al dictador”, refiriéndose al presidente venezolano Nicolás Maduro.
En respuesta a Ortagus, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia sugirió que Washington debería seguir aplaudiendo, ya que eso lo mantendría lo suficientemente ocupado como para no iniciar un nuevo conflicto.
“Estamos tratando de que mantengan sus manos lejos del gatillo. Así que sigan aplaudiendo, al menos es inofensivo”, publicó la Cancillería rusa en Twitter.
Recordando a Estados Unidos cómo terminan generalmentesus intentos de “promover la democracia” en todo el mundo, Zajárova aseveró ante reporteros el jueves que la desafortunada situación con el espacio aéreo maltés no era nada nuevo.
“Ya hemos pasado por esto”, señaló. “Cuando enviamos ayuda humanitaria a Siria, a nuestros aviones también se les negó la autorización del espacio aéreo. Recuerda a los obstáculos que ponen ante los vuelos rusos”.
Los mismos países que intentaban impedir la ayuda rusa a Siria estaban tratando de efectuar el “cambio de régimen” en Damasco al dar apoyo ilegítimo a los militantes “moderados”, subrayó Zajárova. “Todos recordamos cómo terminó”, concluyó la portavoz.