Azua.-En el sector Barrio Nuevo del distrito municipal Doña Emma Balaguer (conocido como Finca 6), en Azua, la tragedia llegó sin avisar. Un incendio arrasó dos humildes viviendas dejando a dos familias, entre ellas una madre soltera, en la calle, sin nada. Ni ropa, ni comida, ni cama. Solo dolor, cenizas y la esperanza de que alguien escuche su clamor.
Dilenia Rosario, madre de varios niños, apenas puede hablar sin que las lágrimas le ganen. Al contar cómo el fuego consumió su hogar, su voz se quiebra: “Perdí todo. Ni una sábana me quedó. Mis hijos y yo dormimos en el suelo, no tenemos nada”.

Su vecina, Meirin Brito, vive el mismo infierno. Su casa también fue pasto de las llamas. “Mis hijos no van a la escuela. El fuego se llevó sus mochilas, sus uniformes, sus zapatos…”, dice, mientras el llanto le corta las frases.

Ambas mujeres, sin fuerzas pero con fe, apelan a la sensibilidad de la diputada Grey Pérez Díaz, pidiéndole ayuda urgente.
Estas dos madres representan muchas otras historias silenciadas por la pobreza. Hoy piden ayuda. Mañana podría ser muy tarde.
