La administración local se propone recaudar al menos la mitad de los recursos que invierte en recoger los desechos de los perros en las calles.
Como respuesta ante los altos costos que representa limpiar los excrementos de perros en las calles, las autoridades locales de Zamora (España) han aprobado esta semana un impuesto a los dueños de estas mascotas, que se empezará a cobrar a partir del próximo año, informa el medio local La Opinión de Zamora.
En esta localidad, donde el número de perros es mayor que el de niños, las personas que los posean «deberían contribuir en cierta medida a los gastos» de aseo, dijo a Reuters el consejero local de impuestos, Diego Bernardo, quien admitió que no todos están satisfechos con la medida.
«El impuesto ha causado una fuerte reacción ciudadana. Algunos no están de acuerdo en absoluto, otros simplemente se resignaron al hecho», agregó.
Nueve euros por perro
Tener un perro en esta ciudad le costará a su dueño un modesto impuesto de nueve euros (cerca de 10 dólares) al año, con lo cual se espera financiar la creación de más áreas destinadas al paseo de las mascotas, así como la limpieza y la distribución de bolsas para sus desechos.
De esta manera la administración espera recaudar anualmente entre 50.000 y 90.000 euros (de 55.000 a 100.000 dólares), cifra que no llega a la mitad de lo que invierte actualmente en tal asunto.
Zamora no es la primera ciudad en implementar una iniciativa de esta índole. La Haya, en los Países Bajos, tiene uno de los impuestos más altos por este concepto: 120 euros al año, que aumentan con cada mascota adicional.