Al menos 11 personas han fallecido tras las manifestaciones que se desarrollaron la noche del 2 de octubre en el sur de Irak. Entre las víctimas se encuentran siete civiles y un policía, que murieron en la ciudad de Nasiriya, mientras que las otras cuatro víctimas se reportaron en Amara, informa Reuters citando fuentes médicas y policiales.
Esta semana, la ciudadanía iraquí ha salido a las calles para protestar por la falta de empleo, la corrupción y los servicios públicos deficientes. En total, los disturbios antigubernamentales han dejado 18 personas muertas y cientos de heridos tomando en cuenta los casos reportados en días anteriores.