El acusado, un narcotraficante convicto por contrabando de cocaína, es el primero de 11 sospechosos en ser juzgado por el asesinato de Jovenel Moïse.
Un narcotraficante convicto, Rodolphe Jaar, se declaró culpable ante un tribunal federal estadounidense, en el estado de Florida, de participar en 2021 en el magnicidio del entonces presidente de Haití, Jovenel Moïse, informa la agencia AP.
De acuerdo con los registros judiciales, Jaar, quien cumple una sentencia de cuatro años y tres meses de prisión por tráfico de cocaína, aceptó haber conspirado para proporcionar apoyo material con fines de secuestrar y matar al presidente Moïse.
Según señalan los documentos judiciales, el acusado proporcionó armas, comida y alojamiento a los comandos colombianos y a otras personas involucradas en el asesinato.
EE.UU. imputa a otras cuatro personas en relación con el asesinato del presidente de Haití
A pesar de que el crimen ocurrió en Haití, la Fiscalía estadounidense sospecha que la mayor parte de la planificación y financiación tuvo lugar en el sur de Florida. El plan original, detalla esa agencia, consistía en detener al mandatario semanas antes y trasladarlo en avión a un lugar no identificado; sin embargo, esto fracasó cuando los sospechosos no consiguieron la aeronave ni armas suficientes.
Al declararse culpable, Jaar llegó a un acuerdo con las autoridades para proporcionar información y ayudar a los fiscales a construir casos más sólidos contra los otros 10 sospechosos detenidos por el magnicidio.
Jovenel Moïse fue asesinado de 12 disparos en su domicilio particular, cerca de Puerto Príncipe, la capital de Haití, el 7 de julio de 2021.
