Hoy arrancó una semana que se prevé clave en el caso que se instruye en un juzgado de Madrid en el que se investiga a Begoña Gómez , esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Durante esta mañana ha declarado como testigo por videoconferencia, debido a su delicado estado de salud, el empresario Juan Carlos Barrabés, mientras que el viernes será el turno de la propia Gómez, que lo hará en calidad de imputada, asistida por su abogado.
El magistrado Juan Carlos Peinado imputa a Gómez los delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios , apoyado en las denuncias interpuestas por el pseudosindicato de extrema derecha Manos Limpias y la organización ultracatólica Hazte Oír .
El juez investiga todos los hechos, actos, comportamientos y conductas llevadas a cabo y derivados de la relación entre Gómez y Barrabés desde que Pedro Sánchez llegó a la Presidencia del Gobierno, con el objeto de conocer si la primera pudo favorecer al segundo en la consecución de contratos públicos para sus empresas.
La comparecencia de Barrabés llega después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil entregara un segundo informe, que al igual que el primero concluyó en mayo, descartó cualquier indicio de delito . “En líneas generales, con base en la información observada en los expedientes, la preparación, inicio, tramitación, licitación, adjudicación, formalización y ejecución de los contratos se habría desarrollado, aparentemente, con normalidad y bajo los principios que rigen la contratación pública” , se leía en ese último documento, según recogió Televisión Española.
Reuniones en Moncloa
Durante su testimonio, el empresario ha negado cualquier tipo de irregularidad y ha relatado que mantuvo varias reuniones con Gómez en el Palacio de la Moncloa, sede del Gobierno español, y que en dos de ellas estuvo presente Pedro Sánchez. Ha asegurado que los encuentros versaban sobre innovación tecnológica, ámbito en el que es uno de los mayores expertos del país, según recoge La Vanguardia.
Desde el principal partido de la oposición, el Partido Popular (PP), las reuniones de Sánchez con Barrabés se han tachado de “un escándalo de proporciones inaceptables”, por boca de su portavoz Borja Sémper, quien exigió la comparecencia del presidente para explicar “qué negocios se hacen en Moncloa”, en declaraciones recabadas por Europa Press.
Por su parte, desde el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), la primera reacción ha llegado de la mano de su portavoz, Esther Peña, quien ha asegurado que “no hay nada que no sea una denuncia falsa” y un “ataque personal”. “Si a alguien le parece mal que el presidente de un país mantenga reuniones con empresarios, con el colectivo cultural, con instituciones… no sería un país serio como es España”, concluyó.
Cuatro días para el turno de Gómez
Gómez deberá declarar el viernes, después de que su cita inicial para el pasado 5 de julio debería ser pospuesta por no haber recibido su defensa toda la documentación del caso.
Hazte Oír, que en aquella ocasión convocó concentraciones ante el juzgado, remitió un escrito a la jueza decana de los juzgados de Plaza de Castilla solicitándole que esta vez no permita a Gómez entrar por el garaje, para evitar a los periodistas y otras personas apostadas en la puerta principal.
Al estar citada como imputada, las garantías procesales establecen que Gómez no tiene obligación de declarar ni de responder a las preguntas de ninguna de las partes.
¿De dónde sale esta causa?
La causa contra Gómez se inició a raíz de una denuncia de Manos Limpias basada en ocho recortes de prensa , una de las conclusiones en seguida se reveló manifiestamente falso al referirse a otra persona con el mismo nombre que la esposa de Sánchez.
Entre otras cuestiones el escrito presentado por la organización de extrema derecha señalaba la relación de la esposa del presidente con el empresario Juan Carlos Barrabés.
En 2020 Barrabés ayudó a diseñar el Máster de contenido socioeducativo que codirigió junto a Begoña Gómez en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y se convirtió en una de los profesores del curso.
En el punto de mira están dos cartas proforma que Gómez firmó y que Barrabés adjuntó a varios concursos públicos, junto a otra treintena de misivas con el mismo formato y contenido firmadas por otras personalidades e instituciones, como el Ayuntamiento de Madrid.
Antes de entrar en contacto con la esposa de Sánchez, Barrabés ya era una persona especialmente relevante en el ámbito del emprendimiento social y la innovación tecnológica. Tanto es así que en 2010 fue uno de los dos únicos españoles en la lista de jóvenes del futuro del Foro de Davos , es reconocido por su estrecha relación con la familia Botín y ha colaborado con numerosas instituciones públicas y organizaciones privadas.
Polémica actuación judicial
La actuación del magistrado Peinado ha levantado polémica desde el inicio de este mediático caso. En primer lugar por su admisión a trámite, contraviniendo la jurisprudencia del Tribunal Supremo de no instruir casos cuyas querellas se basan en recortes de prensa sin adjuntar ningún tipo de indicio o prueba.
Además, en un primer momento decretó el secreto de sumario , dando pábulo a todo tipo de elucubraciones. Fue la Audiencia Provincial de Madrid quien llamó la atención al juez y le afeó ese decreto de secreto sumarial y le limitó las líneas de investigación, asegurando que algunas eran meras elucubraciones inverosímiles.
Asimismo, el manejo de los tiempos procesales también ha sido objeto de controversia, especialmente cuando fijó , cuatro días antes de las elecciones al Parlamento Europeo, la fecha de la comparecencia de Gómez (19 de julio).
