Un juez consideró que no cumplió con medidas cautelares como, por ejemplo, la obligación que tenía de utilizar una tobillera electrónica.
Daniel Silveira, un exdiputado bolsonarista que fue indultado el año pasado por el exmandatario Jair Bolsonaro después de ser condenado por el Supremo Tribunal Federal (STF), volvió a ingresar este jueves en una prisión en Brasil.
Su entrada en la cárcel responde a una orden de Alexandre de Moraes, juez del STF, tras haber incumplido varias medidas cautelares como, por ejemplo, la obligación que tenía de utilizar una tobillera electrónica y de usar las redes sociales.
El magistrado consideró que Silveira, expolicía, actuó con “total irrespeto y burla” frente a las decisiones judiciales del Supremo. Este mismo jueves, la Policía encontró 270.000 reales (unos 53.000 dólares) en su casa en Petrópolis, en el interior del estado de Río de Janeiro.
Choque entre la Corte y Bolsonaro
En abril de 2022, Silveira fue condenado por el STF a ocho años y nueve meses de prisión por ataques a la democracia, y 24 horas después recibió el indulto del exmandatario, lo que provocó un choque mayúsculo entre la máxima corte y Bolsonaro.
El diputado Daniel Silveira, el expolicía que se alzó como “estrella” del bolsonarismo en Brasil
Un año antes había sido detenido por atacar a varios jueces de la máxima corte y por divulgar videos en los que hacía apología del Acta Institucional 5 (AI-5), un decreto emitido en 1968 durante la dictadura militar y considerado uno de los más represivos.
Entre su larga lista de escándalos quizá el más sonado fue el que protagonizó en noviembre de 2021, cuando se “atrincheró” en la Cámara en protesta por una orden judicial que obligaba a colocarle una tobillera electrónica.
Silveira, que llegó a alzarse como estrella del bolsonarismo, mantuvo su escaño como diputado hasta el pasado miércoles, ya que con el inicio de la legislatura perdió su condición de aforado.
Este jueves, el senador Marco do Val presento su dimisión y aseguró que había participado en una reunión entre Bolsonaro y Silveira, en la que se discutió “un plan golpista” para evitar que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva asumiese el cargo.
De Moraes autorizó a la Policía tomar declaraciones sobre este asunto al senador, quien en un video en las redes sociales también afirmó que Bolsonaro había intentado “coaccionarlo”.