El jueves, en presencia de Macron, el rabino jefe de Francia, Haim Korsia, encendió la primera vela de la menorá, la ceremonia que abre la semana de la fiesta judía de Janucá.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se ha enfrentado a críticas después de que fuera visto en una ceremonia religiosa judía en el Palacio del Elíseo, informa AFP.
El jueves, en presencia de Macron, el rabino jefe de Francia, Haim Korsia, encendió la primera vela de la menorá, la ceremonia que abre la semana de la fiesta judía del Janucá.
Tras viralizarse en la Red imágenes del evento, políticos opositores franceses no tardaron en arremeter contra el mandatario, aludiendo a que en el país europeo la religión y el Estado están separados por ley.
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Así, el coordinador del partido de izquierda La France Insoumise (Francia Insumisa), Manuel Bompard, tachó la ceremonia de “un error político imperdonable”. Por su parte, la diputada Sandrine Rousseau expresó que “era posible apoyar a la comunidad judía de Francia sin celebrar una fiesta religiosa en el Elíseo”.
El acto fue criticado incluso por la propia comunidad judía del país. Yonathan Arfi, presidente del Consejo Representativo de las Instituciones Judías en Francia, afirmó que realizar esta ceremonia en el palacio presidencial fue “un error”. “Está en el ADN de la república mantenerse alejado de todo lo religioso. Los judíos de Francia siempre han considerado el laicismo como una ley de protección y una ley de libertad”, declaró, agregando que “cualquier cosa que debilite el laicismo debilita a los judíos de Francia”.
Por su parte, Macron aseguró que no se arrepiente “en absoluto” y había permitido la celebración “en el espíritu de la república y de la concordia”. También indicó que él mismo no había participado en ningún ritual o ceremonia religiosa, porque habría sido “irrespetuoso con el laicismo”.
