El presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo palestino, Mahmud Abbás, mantienen este martes conversaciones en la región de Moscú.
Moscú sigue con atención la situación en Oriente Medio, pese a que la operación militar especial sigue su curso, afirmó Putin. “Todo el mundo sabe que hoy Rusia, lamentablemente, debe defender sus intereses, defender a su pueblo con las armas en la mano, pero lo que está sucediendo en Oriente Medio, lo que está sucediendo en Palestina, ciertamente no pasa desapercibido”, dijo.
“Las raíces de este problema se remontan al pasado y están asociadas, en primer lugar, con el hecho de ignorar las decisiones previamente tomadas a nivel de organizaciones internacionales, principalmente de la ONU, sobre la creación de un Estado palestino independiente”, continuó Putin. “Para garantizar una paz estable, confiable y duradera en la región, es necesario implementar todas las decisiones de las Naciones Unidas y, en primer lugar, crear un Estado palestino de pleno derecho”, agregó.
Rusia siempre ha abogado por una solución pacífica del conflicto palestino-israelí, subrayó el líder ruso.
Por su parte, Abbás recordó que desde 1947 han sido adoptadas más de 1.000 resoluciones de la ONU sobre esta cuestión. Sin embargo, dijo que la organización, “debido al comportamiento estadounidense y a la presión de Estados Unidos, fracasó en su misión de adoptar una resolución que implementara y garantizara la realización de los derechos del pueblo palestino”.
Antes del encuentro, el Kremlin precisó que, además de “debatir cuestiones de actualidad sobre el ulterior desarrollo de la cooperación bilateral”, estaba previsto que ambos líderes “intercambiarán puntos de vista sobre la situación en Oriente Próximo a la luz de la actual escalada del conflicto palestino-israelí y de la catástrofe humanitaria sin precedentes en la Franja de Gaza”.