Mursal Mohamed Seid, el migrante somalí en Alemania que en 2021 apuñaló a un hombre más de 100 veces y lo decapitó, podría evitar la deportación porque los fiscales creen que probablemente terminará regresando al país europeo, informa el diario Bild.
Seid, que en el momento del crimen tenía 22 años y varias condenas previas, asesinó a su compañero de piso de 52 años en un albergue para personas sin hogar en el estado de Baviera. El somalí apuñaló a su víctima 111 veces con un cuchillo antes de decapitarlo. Posteriormente aseguró a las autoridades que creía que su compañero estaba poseído por dos demonios que debía matar.
Al considerar que Seid cometió el crimen en estado de discapacidad mental, ya que padece esquizofrenia, fue internado en una unidad de alta seguridad de un hospital psiquiátrico. Pero apenas unas semanas después intentó escapar escondiéndose en un carrito de comida.
Seid hizo su segundo intento de fuga la semana pasada, cuando escapó de sus cuidadoras mientras asistía junto a sus compañeros a la proyección de una película. El somalí estuvo huyendo durante ocho horas, antes de que 100 agentes de policía desplegados en la zona lo capturaran.
Aunque las autoridades alemanas de inmigración han pedido que sea deportado a su país de origen, los fiscales dudan en emitir una orden de expulsión ya que consideran que el criminal volvería de todos modos a Alemania. “La valoración global prescrita debe incluir, entre otras cosas, la gravedad del delito, la peligrosidad del condenado y la probabilidad de que regrese a Alemania”, afirmó el fiscal superior Oliver Baumgartner, agregando que, a este respecto, hay que tener en cuenta que en Somalia el hombre estaría en libertad.