Santo Domingo.-Los recientes actos de violencia que han tenido a menores como principales víctimas han generado una profunda preocupación entre especialistas en conducta humana y la ciudadanía en general.
Entre los casos más alarmantes se encuentran la ejecución de una niña de seis años, la trágica caída desde un balcón de otra niña junto a su madre. Por último brutal caso en el que una niña de nueve años fue despojada de su cuero cabelludo en la provincia de Valverde.
Estos incidentes han resaltado el preocupante repunte de la violencia intrafamiliar. Además han impulsado a expertos y ciudadanos a solicitar medidas inmediatas para abordar esta crisis.
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Mientras que las conjeturas sobre las causas de estos actos horribles varían. Existe un consenso creciente sobre la necesidad de implementar estrategias efectivas que incluyan educación y terapia como herramientas clave para prevenir futuras tragedias.
La comunidad y los especialistas enfatizan la importancia de abordar estos problemas con urgencia. Esto con el objetivo de proteger a los menores y promover un entorno familiar más seguro.
Urge la salud mental
En la República Dominicana, cerca del 20% de la población sufrirá o sufre de algún trastorno mental a lo largo de su vida, según alertan los especialistas en salud mental. Esta alarmante estadística se ve reflejada en el incremento reciente de hechos violentos, que han alcanzado niveles preocupantes desde la pandemia.
José Miguel Gómez, psiquiatra, destaca que la situación es crítica. «La violencia en la sociedad dominicana ha aumentado significativamente, y esto está relacionado con el aumento de trastornos mentales. Es esencial que se amplíe la cobertura y el acceso a los servicios de salud mental», afirma Gómez.
Por su parte, el psicólogo Hanoi Vargas añade que la demanda de atención en salud mental ha crecido notablemente en las últimas semanas. «Los problemas de salud mental son muy comunes y se han visto exacerbados por la crisis económica y social. La respuesta debe ser rápida y efectiva», asegura Vargas.
Los especialistas sugieren que la solución pasa por una reforma integral en el sistema de salud mental. Gómez insiste en la necesidad de incorporar psicólogos y psiquiatras en las comunidades para ofrecer ayuda oportuna y prevenir problemas mayores. «Debemos iniciar con urgencia la implementación de profesionales de la salud mental en las comunidades. Esto permitirá que las personas reciban ayuda a tiempo», señala Gómez.
