María Branyas, la mujer catalana considerada la persona más longeva del mundo y la octava documentada de la historia, ha fallecido en España a la edad de 117 años.
Según medios locales, Branyas murió el lunes, pero la noticia trascendió apenas este martes porque la familia quería resguardar el momento de intimidad.
La mujer, nacida el 4 de marzo de 1907 en San Francisco (EE.UU.), era considerada la persona más longeva del planeta, después del fallecimiento hace año y medio de la monja francesa Lucile Randon, de 118 años. Ahora, el relevo en ese disco lo tiene la japonesa Tomiko Itooka, con 116 años y 89 días.
Su nombre comenzó a ser conocido hace cuatro años, cuando consiguió superar el covid-19 en 2020, la época más dura de la pandemia, a los 113 años de edad.
La noticia de su deceso la han trasmitido sus familiares, a través de una cuenta homenaje a la anciana: “Maria Branyas nos ha dejado. Ha muerto como ella quería: mientras dormía, tranquila y sin dolor”. Su fallecimiento se produjo en un centro geriátrico del municipio de Olot, en la provincia de Gerona.