El hombre que este viernes atacó con cuchillo a varios transeúntes durante un festival en la ciudad alemana de Solingen sigue a la fuga pese a los esfuerzos de la Policía alemana por capturarlo.
Tres personas murieron tras recibir puñaladas en el cuello y ocho resultaron heridas, cuatro de las cuales se encuentran en estado crítico.
La Policía aún no identificó al agresor, por lo que no se sabe ni su nombre ni su edad. La identificación se complica por el hecho de que las autoridades han recibido múltiples descripciones contradictorias del atacante. A pesar de la escasa información sobre el sospechoso, se cree que llevó a cabo el ataque en solitario, pero sus motivos siguen sin estar claros.
Welt tuvo acceso a informes policiales que muestran que uno de los testigos del ataque dijo conocer al sospechoso. Esa persona dijo que el agresor asistía a una mezquita local y gritó “Allahu akbar” (‘Dios es el más grande’) durante la agresión
Las unidades antiterroristas se sumaron este sábado a la búsqueda del delincuente, mientras que las autoridades alemanas no descartan la posibilidad de que se trate de un atentado terrorista, ya que el agresor apuñaló a propósito a las víctimas en la zona del cuello.
En la mañana de esta jornada, un adolescente de 15 años fue detenido después de que dos testigos informaran de que estaba hablando con otro hombre sobre intenciones que podrían encajar con el delito. El menor detenido no se considera autor de la masacre.
El canciller alemán, Olaf Scholz, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas. “El agresor debe ser capturado rápidamente y castigado con todo el peso de la ley“, aseveró el líder del país europeo. Al mismo tiempo, la ministra del Interior, Nancy Faeser, aseguró que “las autoridades de seguridad están haciendo todo lo posible para atrapar al autor y determinar el trasfondo del ataque”.
El Estado Islámico reivindicó el ataque, informa Bild. El medio afirma que el grupo terrorista confirmó que el atacante, que sigue a la fuga, era su “soldado” y perpetró la acción como venganza por “los musulmanes de Palestina”.