Santo Domingo.-Comunitarios del sector El Tamarindo, en el municipio Santo Domingo Este, denunciaron que están con el grito al cielo por los constantes apagones.

Aseguraron que los cortes eléctricos son de hasta 24 horas.

Con colmados y pequeños negocios en total oscuridad, los comunitarios del Proyecto J.F. Kennedy del El Tamarindo de Santo Domingo Este, intentan sobrellevar las más de 24 horas de apagones qué reciben. Aseguran les provoca la pérdida de mercancía.

«Aquí hay productos que se están dañando porque no hay energía, aunque le dé un chin de frío, pero entonces cogen mal olor. Se dañan las chuletas, las costillitas, los salamis cuando ya están partidos»dijo Anselmo Pérez, un comerciante detallista que lleva varios años en el sector.

Igualmente, Óscar Cruz, detallista colmadero dice sentirse frustrado porque en cualquier momento el servicio eléctrico se corta sin hora de vuelta.

Se dañan los productos

«No se pueden comprar ni el queso, ni el jamón, ni ninguno de los productos que necesitan refrigeración porque no contamos con energía y eso se traduce en perdidas.

Dijeron que aunque no compren los productos y eviten que se dañen, si no lo tienen, al momento de que el cliente va a comprarlos no le pueden dar el servicio, dijo Cruz.

Dijeron que la única alternativa que tienen es cerrar sus negocios y esperar que llegue la luz cuando las distribuidoras decidan mandarla.

Otra que se queja es Inés Ramírez, ama de casa que se gana la vida vendiendo mabi y refrescos; la falta del servicio no le permite ganarse el sustento de su familia.

«Imagínese usted, yo vivo de vender mabí y refresquitos, pero quien se toma un mabi caliente o un refresco hirviendo», dijo.

Se quejan de los apagones no cesan, las facturas no dejan de subir y sin producción se ven acorralados por no poder pagar las facturas.

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Ayyy pero qué calor

Aparte a esta problemática, las inclemencias de las altas temperaturas que se agudizan, afectando tanto a jóvenes como  adultos.

Juanita Rosado tiene un pariente en cama, conectado a un aparato, pero no puede mantenerle la habitación con la ventilación debida.

«Yo tengo un señor en lecho, en cama, que vive conectado a una cama y se me descargo el inversor y todo, ya usted sabe como yo estoy», dijo.

Anselmo Pérez, comerciante, sus hijos les dio una fiebre y puso los hijos en una sola cama bajo el mosquitero que hay en la casa. No quería que un dengue los contagiara.

«No había luz, yo me acosté en una camita que tengo y no pude yo dormir por los jodidos mosquitos», expresó apenado el comerciante.-

Un poste peligra vidas

El presidente de la Junta de vecinos, José Ramón Ferreras, indicó que reportaron, en reiteradas ocasiones, un poste de luz que está a punto de colapsar.

«Pero nadie nos hace caso, ustedes pueden ver las condiciones que está ese poste de luz, que en cualquier momento puede caer y provocar un desastre. Edeeste tiene contratista y parece que le quieren hacer una mala jugada a Edeeste», dijo Ferreras.

Agregaron además que no poseen contadores y la factura de la luz se ha triplicado y que de este apagón extenderse se lanzarán a las calles a protestar.

 

Un poste del tendido eléctrico pone en peligro la vida de las personas.

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