El líder del movimiento turco FETO, Fethullah Gulen, señalado por el Gobierno como instigador del fallido golpe de Estado en 2016, ha muerto a los 83 años de edad, informó su sobrino Ebuseleme Gulen.
“Fethullah Gulen se ha ido al horizonte de su alma. Que Alá tenga piedad de él”, escribió en su cuenta de X.
Según medios locales, últimamente su estado de salud era muy problemático, con insuficiencia renal y diabetes, además de demencia. Gulen residía en Pensilvania, EE.UU., desde 1999.
Poco después, el ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Hakan Fidan, declaró, citado por Anadolu, que las fuentes de inteligencia confirman la muerte de Gulen.
En marzo de 2016, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, culpó a Gulen de incrementar las tensiones en el sudeste del país, territorio en el que predomina la población kurda que se opone a Ankara. En abril de ese año, la Policía detuvo a unas 88 personas sospechosas de tener vínculos con el clérigo musulmán. En mayo, 29 personas más fueron detenidas en Esmirna, de acuerdo con el periódico Hurriyet. En ambos casos, las autoridades acusaron al Movimiento Gulen de organizar un “Estado paralelo”.
Por su parte, los seguidores del clérigo han negado su supuesta relación con los acontecimientos, destacando que a lo largo de 40 años han defendido la paz y la democracia, y han denunciado la intervención militar en la política.
En julio de 2016, se produjo un intento de golpe de Estado en Turquía, y Gulen fue señalado como el “cerebro” del acto.
