Peravia , RD.- Raulín Brito Tejeda, confiesa haber abandonado el bajo mundo de las drogas, hace 16 años, que se ha entregado por completo al evangelio y denuncia “en la provincia Peravia hay un punto de drogas en cada esquina, dirigido por la DNCD”.
Reveló que mientras Baní se hunde en el flagelo de las drogas, las autoridades se hacen de la vista gorda.
Aseguró que no le teme a nada, sino que lo que aspira es a que su provincia sea saneada y liberada del tráfico y la venta de drogas.
Brito Tejeda exhortó a todo el pueblo, especialmente a los jóvenes, que todo aquel que esté en este negocio, si no se reivindica y se arrepiente a tiempo, irá a parar tarde o temprano al cementerio.