La organización humanitaria Médicos Sin Fronteras ha decidido cerrar de forma permanente su hospital en un barrio del sur de Puerto Príncipe, la capital de Haití, debido a la violencia de los grupos armados que luchan entre sí por el control del vecindario, informa la agencia AFP.
El hospital, que operaba desde 2006 en el sector conocido como Martissant, ofrecía tratamiento médico gratuito a aproximadamente 300.000 personas. Sin embargo, en los últimos meses la violencia de los grupos armados se ha agravado, por lo que incluso la Policía ha abandondado el vecindario.
“Incapaz de garantizar la seguridad de su personal y pacientes, y queriendo llamar la atención sobre la insoportable situación en Martissant, Médicos Sin Fronteras se ve obligada a cerrar sus puertas después de 15 años de presencia en la zona”, comunicó la ONG.