La exposición prolongada al benceno aumenta el riesgo de cáncer, puede provocar trastornos sanguíneos y debilitar el sistema inmunitario, alertan los expertos.
Una docena de refinerías de petróleo en EE.UU superaron en 2021 los límites de emisiones de benceno establecidos por la Agencia de Protección Ambiental del país (EPA, por sus siglas en ingles), según un nuevo estudio de la organización sin ánimo de lucro Environmental Integrity Project.
Las refinerías toman petróleo crudo y otras materias primas y los refinan en productos como gasolina, diésel y otros carburantes, liberando en el proceso varios contaminantes al aire como el benceno, que representa un peligro para la salud humana.
El estudio señaló que 118 refinerías de petróleo, de las 129 operables en EE.UU. en 2021, informaron a la EPA de concentraciones de benceno. En 2020, 13 refinerías reportaron emisiones de benceno superiores al límite establecido, de 9 microgramos por metro cúbico. De las 12 refinerías que excedieron el límite en 2021, cinco están ubicadas en Texas.
Se estima que 6,1 millones de personas viven en un radio de 5 kilómetros alrededor de alguna refinería en EE.UU., en su mayoría poblaciones minoritarias y de bajos ingresos. Según el análisis, estas personas ya sufren dolencias que los hacen especialmente vulnerables a los contaminantes tóxicos del aire como el benceno.
En 2012, la EPA adoptó nuevas regulaciones federales que requieren que las refinerías de petróleo monitoreen las concentraciones de benceno a lo largo de sus límites e informen los resultados cada tres meses y si los datos muestran concentraciones superiores a los límites establecidos, deben identificar y limpiar las fuentes de emisión. Para 2018, las refinerías de EE.UU. comenzaron a medir las concentraciones promedio de benceno alrededor de las cercas de sus instalaciones.
¿Qué provoca la exposición al benceno?
A largo plazo, la exposición a niveles de benceno relativamente “bajos” puede provocar trastornos sanguíneos, debilitación del sistema inmunitario y un riesgo elevado de cáncer.
Las exposiciones durante un período breve pueden desencadenar síntomas neurológicos agudos como mareos y dolores de cabeza. Asimismo, puede reducir los recuentos de células sanguíneas en las personas durante el desarrollo prenatal y debilitar el sistema inmunitario.