El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, empezó este lunes una visita oficial de dos días en Costa Rica, donde ya se reunió con su homólogo costarricense, Rodrigo Chaves.
En su primer encuentro, luego del recibimiento oficial, ambos líderes charlaron de forma distendida antes de que Chaves alabara a Bukele como una “figura mundial”. “Tiene un apoyo en Costa Rica que es verdaderamente impresionante”, aseveró.
Luego Bukele fue condecorado con la Orden Nacional Juan Mora Fernández (la principal distinción de la nación centroamericana), en el grado Gran Cruz Placa de Oro, por su gestión en materia de seguridad ciudadana.
Con la banda ya colocada, el jefe de Estado salvadoreño reiteró que su país era la más insegura del mundo y ahora la realidad es muy diferente. “No hay un cantón, caserío, barranco, comunidad, calle, avenida que no sea totalmente segura en cualquier hora del día”, sostuvo.
De igual manera, afirmó a la sociedad costarricense que “les está yendo muy bien con la gestión” de Chaves e indicó que la deflación vivida en Costa Rica es un espejo para su Gobierno. De hecho, destacó que en octubre El Salvador también tuvo baja de precios.
“Vinimos a aprender mucho de esta joya de país que tienen ustedes”, subrayó Bukele.
La “ofensa”
En una conferencia de prensa reciente, Chaves resaltó los logros de su colega centroamericano. “Imagínense que El Salvador era uno de los lugares más violentos e inseguros del mundo (…). Y ahora es uno de los países más seguros del mundo, más aún que Suiza, entiendo”, dijo.
El mandatario indicó que Bukele recibirá “todos los honores que el Gobierno costarricense” puede otorgar. Y, por el contrario, la Asamblea Legislativa y el Poder Judicial se negaron a rendirle honores en una sesión formal. Un hecho criticado por Chaves.
“Eso es absolutamente irrespetuoso, es absolutamente inaceptable y una ofensa al pueblo de El Salvador”, subrayó.
Cruces oficiales
La semana pasada la Presidencia de Costa Rica informó que ambos líderes “acordaron una agenda que no incluye a la Asamblea Legislativa ni a la Corte Suprema de Justicia; tampoco con ningún representante de esos poderes”.
Tanto Rodrigo Arias como Orlando Aguirre, jefes del Congreso y la Corte Suprema, respectivamente, habían propuesto reuniones individuales, pero Chaves descartó esa opción.
Por lo tanto, no se considera una visita de Estado y al final se concretó como una visita oficial, de menor relevancia protocolaria.
Bukele, en cambio, lo catalogó como una “visita de Estado” en un mensaje publicado en X. Sin embargo, la Presidencia costarricense lo llamó una “visita oficial”.
Entretanto, se espera que ambos presidentes sostengan una reunión bilateral y el martes hagan una “visita de trabajo” al Centro Penitenciario La Reforma, una de las principales prisiones de Costa Rica.