El campeón de la NBA en la temporada de 2020 —en caso de que sea posible coronar a alguno— será el ganador definitivo en una campaña que habrá demorado más de un año en disputarse de principio a fin.
Una campaña que incluyó en su antesala un episodio de tensión política entre la NBA y China. Más tarde, se enlutó por las muertes de David Stern y Kobe Bryant, fue influida por los problemas de desigualdad racial en el país y, por si fuera poco, se interrumpió por una pandemia.
Es una temporada como ninguna otra.
Entonces, ¿habrá que colocar un asterisco junto al nombre del campeón? Por supuesto que no.
Para los equipos de la NBA este campeonato podría ser el más difícil que hayan conseguido. Llegará después de tres meses de vivir prácticamente en una burbuja en el complejo de Disney cerca de Orlando, Florida.
Toda la postemporada se realizará sin público en el graderío. La mayoría de los jugadores pasará todo ese tiempo lejos de sus familiares y amigos.
Y sólo uno de los 22 equipos que se dirigen a Disney podrá afirmar que todos los problemas valieron la pena.
“He escuchado a mucha gente decir que habrá algo así como un asterisco junto al nombre del campeón”, dijo el pívot de Milwaukee y actual Jugador Más Valioso Giannis Antetokounmpo. “Siento que al final del día este será el campeonato más difícil que podrías ganar debido a que las circunstancias son extremadamente difíciles en este momento. Entonces quien lo desee más podrá salir y tomarlo”.
El astro griego no es el único con este sentimiento sobre la legitimidad del próximo campeón.
La mayoría de los 22 equipos que se dirigen al campus de Disney la próxima semana —los primeros tienen programado llegar el 7 de julio— dedicaron el miércoles a comenzar con la tercera fase del proceso de reanudación Los entrenamientos siguen siendo individuales pero obligatorios. Ningún equipo puede practicar de manera colectiva sino hasta llegar a Orlando.
Los equipos no volverán a estar juntos sino hasta que se encuentren en el centro de la Florida.
Hay ciertos aspectos de la reanudación que no serán fáciles para nadie involucrado, como el aislamiento del mundo exterior, las pruebas diarias y las reglas altamente estrictas que la NBA impuso tras consultar con funcionarios de salud.
El entrenador de Denver Michael Malone dijo que esto probará quién tiene el temple de campeón.
“Si eres capaz de llegar a un burbuja, estar aislado de tus amigos y familiares, no tener ventaja de casa, reponerte a la interrupción por cuatro meses de la temporada y puedes pasar 90 días y salir como campeón, creo que será el título más difícil de ganar”, indicó Malone.
Algunos podrían pensar lo contrario, pero San Antonio, campeón en 1999 tras una temporada regular de 50 partidos y Miami, campeón tras 66 juegos de campaña regular —ambos acortados por un conflicto laboral con la liga— no vienen formalmente con un asterisco justo a su nombre.
A nadie le regalarán la temporada.
El coach de los Clippers de Los Ángeles Doc Rivers habló de una conversación reciente que tuvo con el comisionado de la NBA Adam Silver, quien dijo que el equipo que gane el título merece algo más que un asterisco.
“Dijo que el equipo que gane merece una estrella dorada, no un asterisco”, dijo Rivers. “Si piensas en la dificultad mental que les requerirá, todo se tratará del talento. Se va tratar de que los equipos se recuperen y jueguen juntos. Van a haber muchas situaciones que nos van a llegar y no lo sabemos aún. Va a ser un reto de fortaleza mental”.
