Este jueves culmina en Caracas una de las campañas electorales más cortas y más intensas de Venezuela, que se ha caracterizado por una medición de fuerzas a través de la presencia física de los candidatos en distintas ciudades del país suramericano.
La confrontación a través del discurso de los aspirantes a un cargo político, que suele acompañar los procesos de votación, aunque ha estado presente ha sido desplazada por el pulso de la penetración territorial de los dos principales aspirantes a la presidencia. El interior del país ha sido el más golpeado por la situación económica producto de las sanciones.
Mientras que el presidente Nicolás Maduro, quien opta por la reelección este domingo, se ha presentado como la “garantía de paz y estabilidad” con cifras que respalda el llamado ‘milagro económico‘, la política opositora María Corina Machado, inhabilitada por 15 años para ejercer cargos públicos, ha posicionado como lema “hasta el final” y ha presentado un plan de Gobierno que propone privatizar la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
Y es que en este proceso electoral hay un elemento atípico. Edmundo González, el candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), bloque extremista de la oposición, ha sido solapado por Machado, que es la cabeza visible de los recorridos por el país, a pesar de que su rostro no aparecerá en el tarjetón electoral porque no puede participar en el proceso, lo que podría generar confusión entre sus seguidores a la hora de votar.
“Que bajen los barrios”
El chavismo ya comenzó con las actividades de la ‘Gran Toma de Caracas’, que promete extenderse hasta avanzada la noche. Esa fecha corresponde con la conmemoración de la fundación de la capital venezolana, que además es el centro político administrativo del país.
En las redes se han compartido fotos y videos de las caminatas que parten desde los diferentes puntos de concentración establecidos en la capital venezolana.
“Que bajen los 562 barrios que hay en Caracas”, pidió el jefe del Comando de Campaña Venezuela Nuestra del Siglo XXI, Jorge Rodríguez. En la capital venezolana, las décadas de exclusión socioterritorial hicieron que los sectores populares forjaran sus casas y barriadas en las faldas del cerro Ávila, emblema de la ciudad.
Los simpatizantes de Maduro harán movilizaciones desde Petare (Este), la cadena de barrios más grande de América Latina, hasta Catia (Oeste), un sector popular considerado el bastión del chavismo pasando por las principales avenidas capitalinas, que fueron cerradas parcialmente la víspera.
Se tiene previsto que este fin de la campaña, que comprende actividades en las 22 parroquias caraqueñas, también cuente con la presencia de 60.000 motorizados “que harán actividades de agitación y marchas”, según Rodríguez, y que son símbolo de resistencia en el chavismo.
El candidato del Polo Patriótico, según los reportes de los medios, ha estado en 250 ciudades en los 23 estados venezolanos durante la campaña electoral, lo que representa un esfuerzo por llegar a grandes núcleos urbanos y poblaciones apartadas, a pesar de las limitaciones de seguridad que han impuesto los fallidos atentados en su contra.
El presidente Maduro ha dicho en repetidas oportunidades que respetará los resultados y ha llamado al pueblo a defenderlos en la calle de manera pacífica.
‘La hora de Caracas’
La oposición ha convocado para ‘La hora de Caracas’ en Las Mercedes, una pudiente urbanización capitalina y zona comercial. Hasta ahora no se ha especificado cuál será el recorrido, pero no ha habido sorpresas en cuanto a los sitios que tradicionalmente ocupa en la capital.
En el afiche promocional aparecen González y Machado, en una imagen tomada en momentos diferentes pero presentada como si estuviera juntos, lo que apunta a cierto descompás.
Otra de las características atípicas es que en las calles no se observan pancartas ni propaganda electoral alusiva al aspirante de la PUD, mientras que en las plataformas sociales y medios de comunicación es Machado la que monopoliza las apariciones y González está relegado a un difuso segundo plano.
En el mensaje para invitar a la movilización de este jueves, nuevamente es la fundadora del partido derechista Vente Venezuela quien se dirige a sus simpatizantes, sin que el candidato del bloque opositor esté a su lado. Esta situación es inédita, pues es la primera vez que un aspirante a la silla de Miraflores no tiene la vocería principal en su campaña ni aparece en los medios.
En cuanto a Machado, ha sido una bandera de su campaña el posicionar la narrativa de que se cometerá un fraude el día de las elecciones, que le arrebataría el triunfo a González. Esto implica un desconocimiento de la transparencia del sistema electoral venezolano, que ha sido uno de los más auditados, sin que los venezolanos hayan depositado aún su voto en las urnas.
La exdiputada además ha dicho que Maduro tendrá que aceptar los resultados, a pesar de que González, su delfín, no firmó con los demás aspirantes a la silla de Miraflores el documento donde se comprometían a respetarlos.
