Economistas de la UASD y del Intec advierten sobre las dificultades económicas de un año electoral.
Santo Domingo, RD.- La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estima que el producto interno bruto (PIB) de República Dominicana tendrá un crecimiento de 4.7% durante el año 2020.
La Cepal vaticina que la economía dominicana cerrará 2019 con un crecimiento de un 4.8%, un bajada importante de 2.2 puntos porcentuales respecto al 7% de 2018.
El organismo estima que en el crecimiento del 4.7% del próximo año incidiría la “incertidumbre externa en torno al brexit y las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, así como a la desaceleración de la economía mundial”.
Rafael Espinal, coordinador de la carrera de Economía del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec), entiende que 2020 será un año “complicado” y que llama a preocupación, ya que tendrá un dos elecciones, en febrero y mayo, así como un eventual cambio de gobierno, “ya sea dentro del mismo partido o pasar a la oposición”.
“Será un año en el que la tentación de desajustar el Presupuesto para aumentar el gasto de campaña electoral, en medio de una situación de la ralentización de la economía mundial, de falta de ingresos de acuerdo a las expectativas que tiene la economía dominicana, obligan a hacer unos pronósticos bastante conservadores”.
La misma preocupación tiene Antonio Ciriaco Cruz, vicedecano de Economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). “Los dos procesos eleccionarios pautados para febrero y mayo, y la altísima probabilidad de una segunda vuelta (en la votación presidencial), serán fuentes de incertidumbre política que afectarán el consumo privado duradero y la inversión privada en el año 2020”.
Cruz entiende que en 2020 el crecimiento será muy parecido al de 2019. “En realidad la economía dominicana comenzó un ciclo de moderación del crecimiento económico que se prolongará más allá de 2020”, dice.
Entiende que, al margen de los factores políticos internos, el PIB de República Dominicana se verá afectado por la desaceleración de la economía estadounidense que terminará creciendo para los próximos años en la vecindad de un 2.0%.
También, por la incertidumbre generada por la guerra comercial entre China y Estados Unidos, la cual provocará un menor crecimiento de la economía mundial, el cual rondará un 3.0%.
“Con estos condicionantes internos y externos no se vislumbra que en los próximos años la economía dominicana tenga tasas promedio de crecimiento, como en los años anteriores, 2012-2018, en los que creció a tasas promedios de un 6.1%”, dice el economista de la UASD.
La Cepal entiende que en la desaceleración del crecimiento de República Dominicana inciden diversos factores, “como la desaceleración de la economía mundial y muy en particular la de Estados Unidos, el principal socio comercial de la República Dominicana, así como la reducción en la llegada de turistas”.
Señala que de enero a octubre se registró una reducción interanual del 3.8% en la llegada de extranjeros al país (un 5.4% menos de estadounidenses). “Esto se debió al efecto transitorio relacionado con el deceso de algunos turistas estadounidenses a principios del año, pero se espera que se revierta la tendencia luego de las aclaraciones hechas por el FBI en el sentido de que se debieron a causas naturales”, resalta.
Según cifras del Banco Central, durante 2018 el turismo aportó ingresos al país por US$7,560.8 millones.
Entre enero y junio de 2018 los ingresos ascendieron a US$3,957.9 y tuvieron un crecimiento de 4.9% (US$189.2 millones) con respecto a los US$3,768.7 millones del mismo período de 2017.
En los primeros seis meses de 2019, según los últimos datos del Banco Central, el turismo reportó ingresos por US$4,085 millones, un crecimiento relativo más bajo, equivalente a 3.2% (127.1 millones), que el que experimentó en 2018.
“Se espera una recuperación del sector de turismo”, vaticina la Cepal en su último pronóstico sobre el país.
En relación al Presupuesto Nacional que se discute para 2020, la Cepal recuerda que contempla un déficit fiscal del sector público no financiero equivalente al 2.5% del PIB.
“El balance de la cuenta corriente seguirá una tendencia a la baja, con una reducción del 1.7% del PIB para 2020. Se prevé que la inflación se mantendrá dentro del rango meta del Banco Central entre el 3% y el 5%”, dice.
Mientras, desde el Intec, Espinal señala el hecho de que “tenemos por delante un año con fuertes presiones sobre la tasa de cambio”.
“Siempre un año electoral crea expectativas negativas en las inversiones, el turismo no estará en su mejor momento, tenemos unas zonas francas que están exportando menos de lo normal, unas exportaciones hacia Haití que se han caído debido a la situación interna haitiana, de manera que 2020 será un año complicado”, sostiene.
Sostiene que después del próximo agosto, cuando se instale el próximo Gobierno, aumentarán las presiones propias de una reforma fiscal que debería realizarse, así como “presiones fiscales para el cierre de año y un gobierno nuevo que de toda manera tendrá que aplicar algunas novedades en la política económica”.
Déficit
La Cepal prevé que República Dominicana finalizará 2019 con un déficit equivalente al 3% del PIB en el sector público no financiero, “más que el del 2.4% del PIB registrado en 2018”. Atribuye esa situación a un menor dinamismo de los ingresos del Estado.
Estima que al cierre de 2019 habrá un superávit primario del sector público no financiero del 0.3% del PIB y que en 2018 alcanzó un 0.5%.
Señala que los gastos totales del Gobierno central aumentaron un 8.7% interanual real entre enero y agosto.
Plantea que en agosto de 2019 la deuda pública del sector no financiero equivalía al 41.9% del PIB, en comparación con el 37.6% del PIB en diciembre de 2018. “La mayor parte de esta deuda (67.3%) está contratada con acreedores externos, el 25.1% con acreedores nacionales y el 7.6% por concepto de deuda intergubernamental”, dice.