Ese eclipse penumbral se podrá observar desde la mayor parte de América del Norte y del Sur, así como desde zonas del sudoeste de Europa y África.
La noche del 4 al 5 de julio, los habitantes de la mayor parte de América del Norte y del Sur, así como de zonas del sudoeste de Europa y África, podrán observar el eclipse penumbral conocido como Luna de Trueno. Este será el tercer eclipse lunar de 2020, después de la Luna del Lobo del 10 de enero y la Luna de Fresa del 5 de junio.
No obstante, el fenómeno será difícil de ver a simple vista debido a que solo el 35 % de la luna estará cubierta por la penumbra de nuestro planeta. La NASA afirmó en una actualización de eventos astronómicos para julio que “la ligera reducción en el brillo de la Luna será difícil de notar con el ojo humano”.
Durante el eclipse, que llegará a su punto máximo a las 4:29 GMT del domingo, aproximadamente un tercio de la Luna llena se oscurecerá ligeramente durante unas horas a medida que nuestro satélite pase a través de la penumbra generada por la Tierra.
La Luna llena de julio fue bautizada como Luna de Trueno por las tribus nativas algonquinas de Norteamérica debido “a las frecuentes tormentas eléctricas de principios de verano”, escribe la NASA. Otro nombre del fenómeno es Luna de Ciervo, que se refiere a la época cuando “las nuevas cornamentas de los ciervos salen de sus frentes”.
El 5 de junio, el fenómeno conocido como Luna de Fresa dio paso al llamado corredor de eclipses, período en el que ocurren varios eclipses seguidos en un corto lapso de tiempo.