La velocista Madiea Ghafoor fue detenida en junio cuando cruzaba la frontera alemana con más de 50 kilos de metanfetamina y éxtasis en el maletero de su automóvil.
Un tribunal de Alemania ha declarado culpable de tráfico de drogas y condenado a ocho años y medio de prisión a la atleta neerlandesa Madiea Ghafoor, informa el diario Bild.
Esta velocista olímpica fue detenida el pasado 18 de junio en Emmerich del Rin (Renania del Norte-Westfalia, Alemania) fronteriza con Países Bajos durante un control policial rutinario y los agentes encontraron en el maletero de su auto 13,19 kilos de metanfetamina y otros 43,34 kilos de éxtasis por un valor equivalente a dos millones de euros —más de 2,22 millones de dólares—, además de 12.000 euros en efectivo, unos 13.350 dólares.
La sentencia para esta mujer de 27 años ha sido superior a la requerida (siete años y medio) debido a al volumen de estupefacientes que transportaba, que estaría destinado a su venta con fines de lucro.
Ghafoor alegó que pensó que llevaba químicos para dopaje deportivo y que nunca se habría involucrado a sabiendas en asuntos con otras drogas, pero la corte declaró inverosímil su argumento y la acusó de importación ilegal y tráfico de drogas en grandes cantidades.
Madiea Ghafoor, de ascendencia pakistaní, es campeona neerlandesa de 400 metros en pista cubierta y formó parte del equipo de Países Bajos en la modalidad de 4×400 metros en los JJ.OO. de Río de Janeiro 2016.
Se sabe que esta mujer apelará su sentencia.
