La inexplicable ausencia de mamá o de papá en la vida de un niño, agota un período de muchas preguntas.
Por qué, cómo, cuándo, son el inicio de varias interrogantes. El dolor y culpa puede embargar a muchos niños.
Algunos pueden creer que su madre abandonó el hogar por su culpa. Luego del paso del tiempo puede venir el resentimiento, por considerar injustificada la ausencia del padre o la madre.
Los temas de abandono a niños y adolescentes son complejos. Además del dolor de los niños está el manejo de la culpa de los progenitores.
Para algunos padres abandonar su lugar de residencia o país es un decisión dolorosa, pero necesaria económicamente.
Tendrá sus consecuencias, pero puede ser beneficioso en ciertos aspectos.
Otras causas de separación son por conflictos de pareja.
En ocasiones las separaciones pueden ser por violencia contra la mujer, en algunos casos, pero menos, la violencia es contra el hombre.
La infidelidad puede ser causa frecuente de separación de la pareja y el culpable puede ser el hombre o la mujer.
Aunque los hijos se quedan con uno de los padres, generalmente la madre, la relación de los hijos con ambos progenitores se modifica y el espacio emocional seguro que brindaba la pareja se fractura y esto puede afectar la conducta de niños y adolescentes y pueden presentar síntomas.
En esencia, la ausencia de uno de los progenitores, sea físicamente o por conductas periféricas de padres presentes, pero ausentes de la vida de sus hijos: causan un efecto en el desarrollo psicosocial de los hijos y puede incidir en sus futuras relaciones de pareja.
También se puede quebrar la salud mental de niños y adolescentes, frente a los efectos de la separación de los padres.