La educación y disciplina con pelas persiste en nuestro país. En los barrios, en clase media y demás, se usa la pela.
La violencia en el hogar a los niños se combina a veces con violencia hacia la mujer.
El niño y adolescente que vive en un hogar violento, luego la llevan a la escuela y a la sociedad. Si educamos con violencia cosechamos violencia.
Criar sin violencia es más difícil. Requiere padres responsables que estén pendientes de sus hijos, que los supervisen. Padres con autoridad y amor. Aquellos que ponen reglas y límites.
Los padres que disciplinen positivamente, cosecharán hijos responsables que colaboran en la familia que hacen sus tareas escolares y que llegan a ser ciudadanos responsables.
No es simplemente dejar de pegar, es disciplinar y esto requiere amor, paciencia, control emocional de los padres y un cambio en la vida de la familia.
Las técnicas de Disciplina Positiva, las enseñamos en Terapia y en talleres.