El problema de los militares que abandonan o huyen del Ejército ucraniano este año ha adquirido una magnitud alarmante, reporta el canal Deutsche Welle.
El medio señala, citando a la Oficina del fiscal general de Ucrania, que, en el primer semestre de 2024, las fuerzas del orden del país abrieron casi 29.800 nuevas causas penales por evasión de militares: 18.600 en virtud del artículo de abandono no autorizado de una unidad militar y 11.200 en virtud de un artículo más estricto, deserción.
Según DW, este número ya ha superado las cifras de todo 2023 —entonces se iniciaron 24.100 nuevas investigaciones— y ha triplicado con creces la cifra de 2022 (9.400 casos). En total, durante el conflicto ucraniano casi uno de cada 14 soldados escapó del Ejército, estima el canal.
Se detalla que de los 37.000 nuevos procesos que inició la Oficina Estatal de Investigación en el primer semestre de 2024, el 80 % son casos de deserción y abandono no autorizado de una unidad militar.
Sin embargo, los oficiales ucranianos declararon a DW que estos datos distan mucho de reflejar la magnitud real del problema. Así, algunos afirman que la cantidad de casos reales triplica el número de casos penales, otros incluso la cuadruplican.
“Clandestinidad”
Por su parte, el presidente de la Comisión de Desarrollo Económico de la Rada Suprema de Ucrania, Dmitri Nataluja, comunicó a Financial Times que se cree que unos 800.000 hombres ucranianos pasaron a la “clandestinidad” para evitar el servicio militar obligatorio, cambiando de domicilio y aceptando trabajos remunerados en efectivo, ante la movilización forzosa.
Según el diputado, los ucranianos gastan hasta 2.000 millones de grivnas (unos 49 millones de dólares) al año en comprar documentos de exención.