Azua, RD.- Estas líneas llenas de nostalgia pretenden ser un justo homenaje a un gran ser humano que compartió por más de treinta años entre nosotros.
Fue miembro del primer equipo de Ritmo Social, revista creada en 1991 por iniciativa del entonces Presidente de Listín Diario, don Rogelio Arturo Pellerano Romano, que llevaba como editora a Mónica Gutiérrez Fiallo, de fotógrafo a Justo García y, como luminotécnico a un joven de una sonrisa franca llamado Tomás Paredes.
Con el transcurrir de las décadas se convirtió en la figura obligada de los mejores eventos del país. Su forma cortés y su manera de ser le granjearon el afecto y respeto de todos los que le conocieron.
Hace casi una semana un infarto fulminante lo sorprendió en el lugar que él más amaba: el Listín Diario.
Agradecemos los testimonios de cariño y solidaridad para con él y su familia, y para la familia de Ritmo Social que siempre lo llevará en sus corazones.
¡Hasta luego Tomás! Descanse en paz.
