Israel ha aprobado un nuevo asentamiento en Cisjordania, anunció este miércoles el ministro de Finanzas del país hebreo, Bezalel Smotrich. El asentamiento se denominará Nahal Heletz y abarcará unas 60 hectáreas al suroeste de Jerusalén, cerca de Belén.
“Ningún antiisraelismo ni antisionismo detendrá el desarrollo continuo de los asentamientos. Seguiremos luchando contra la peligrosa idea de un Estado palestino y estableceremos hechos sobre el terreno”, declaró Smotrich.
La organización activista Peace Now denunció que el área designada para el asentamiento está “a una distancia de entre 30 y 250 metros” del pueblo de Battir, que fue reconocido por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, por lo que calificó el plan de “ataque generalizado” contra esa localidad.
“Los asentamientos en el sitio de Patrimonio Mundial no sólo constituyen un intento de interrumpir la continuidad territorial palestina, sino que, en nuestra opinión, constituyen un atentado contra un principio fundamental de los derechos humanos palestinos”, asevera Peace Now.
Según el derecho internacional, todos los asentamientos israelíes en la región se consideran ilegales.