El estado estadounidense de Connecticut se encuentra en estado de emergencia debido a las incesantes lluvias que desde el domingo han afectado varias de sus ciudades. Al menos dos personas han muerto y más de 100 han sido evacuadas, reportan medios locales.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos informó en la tarde del lunes que en las últimas 24 horas las “lluvias extremas” habían desatado “numerosas advertencias y emergencias” a raíz de inundaciones repentinas en todo Connecticut y parte del vecino estado de Nueva York.
En esa misma jornada, Ned Lamont, gobernador de Connecticut, decretó oficialmente el estado de emergencia, ya que las “históricas inundaciones” han sido responsables de “daños importantes” en todo el estado. “Esta declaración puede ayudar a agilizar la obtención de algunos de los recursos necesarios, incluido un posible apoyo federal”, aseguró.
“Estamos hablando de precipitaciones que, en algunas zonas, se producen en niveles que se dan cada 1.000 años […]. Por lo tanto, se trata de una inundación realmente histórica y sin precedentes”, dijo Brenda Bergeron, comisionada adjunta del Departamento de Gestión de Emergencias y Seguridad Nacional del estado, citada por CBS News.
De acuerdo con David Stark, portavoz del Servicio Meteorológico Nacional de Nueva York, en un periodo de seis a nueve horas, el sudoeste de Connecticut registró entre 15 y 25 centímetros de lluvia. En la ciudad de Monroe, por ejemplo, la caída de semejantes cantidades de agua solo sucede cada 200 años. “Es posible que se produzcan precipitaciones adicionales de entre 1 y 3 centímetros en la zona que está bajo alerta”, advirtió la oficina.
Casi una treintena de carreteras han sido cerradas por deslaves de tierra e inundaciones que han traído todo tipo de desechos consigo. La Policía advierte que las carreteras están intransitables y pide extrema precaución. Muchos automóviles han terminado varados entre el agua y se ha insistido en que se evite conducir bajo estas condiciones meteorológicas.
En las zonas afectadas, el servicio de trenes fue suspendido y los aeropuertos JFK, Nawark y LaGuardia presentaron interrupciones en sus actividades debido a las intensas lluvias.
El Centro Estatal de Operaciones de Emergencia de Connecticut dijo, en una publicación en X, que se encuentran monitoreando los impactos de las severas inundaciones y esperan comenzar a coordinar los esfuerzos con las demás agencias estatales. Asimismo, ha hecho un llamado a la población a mantenerse alerta y seguir rigurosamente las indicaciones de las autoridades.