Azua, RD.-En medio de llantos y lágrimas, madre de mujer asesinada junto a su pareja, manifiesta que el verdugo de ambos aún no ha sido apresado “porque ella no depende de nada”.
Mireya Díaz, madre de Virgen Carolina Ramírez, narra que el día 23 de noviembre del 2020, a un año y tres meses, Jeison Alexander Moreno, alias Popita, dio muerte a su hija y a su esposo.
Deprimida y llena de tristeza, doña Mireya cuenta que su vida ha sido un total sufrimiento desde que recibió la noticia de que su hija había sido asesinada junto a su pareja.
Describió cómo se pasea el asesino del doble crimen ante la mirada indiferente de la policía de Azua, y comprobó que la misma policía trata al verdugo como si éste fuera su jefe, ya que en lugar de apresarlo lo que hacen es protegerlo.
“Si yo hubiese tenido dinero, hace tiempo que el asesino de mi hija y de mi yerno tuviera preso”, aseguró la señora.
“Al presidente, a la procuradora y al fiscal de Azua, que tengan misericordia de una madre atribulada”, son las palabras que salen de los labios de Mireya, para clamar por justicia contra el asesino de su hija Virgen Carolina y de su esposo Tony Encarnación.