Santo Domingo, RD.- Convertirse en una “mecenas” es lo que desea con todo interés la velocista Marileidy Paulino, porque su propósito en la vida es poder ayudar a esos niños sin esperanzas que luchan para enfrentar los vaivenes de la vida.
Viene de una familia “monoparental”, cuya madre (Anatalia Paulino) ha tenido que trabajar duro para levantar a sus hijos.
Paulino, la primera atleta de campo y pista que se clasifica para los Juegos Olímpicos de Tokio, ha pasado por muchas y de ahí que se ha propuesto alcanzar una profesión que le permita la creación de una fundación “para ayudar a niños huérfanos”.
“He visto vivir el gran trance de no tener un padre, ver niños huérfanos pasar de todo y por eso, en mi mente y corazón están la creación de una fundación” para ayudar a esos niños que no dependen de nada. “Eso me sale del corazón”.
Paulino que en octubre próximo cumplirá 25 años, en su niñez sitió el peso de la carencia, pero nunca se dio por vencida y junto a sus hermanos y su madre “decidieron echar adelante”.
Ha comenzado a trabajar en alcanzar su propósito. Es estudiante del primer semestre de la carrera de educación física en la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Aunque su actividad principal es el atletismo si mente está enfocada en alcanzar su propósito de ayudar a aquellos desesperanzados de la sociedad.
Paulino es una especialista en los 400 metros planos y alcanzó su clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio al conseguir la marca de 50.31 segundos en la distancia de los 400 metros planos en el marco del Primer Festival de Velocidad Isaac Ogando celebrado recientemente en el la pista de atletismo del complejo deportivo del municipio de Bayaguana.
Su meta
Su sueño de ser mecenas de niños huérfanos va acompañado su aspiración de alcanzar una actuación “digna” para República Dominicana en Tokio.
“Estoy preparando fuerte cada día, porque cualquier cosa puede pasar”, expresa Paulino, nativa de la comunidad de Don Gregorio del municipio de Nizao.
El consistente trabajo en su preparación le ha distanciado de su familia, para ella ha sido muy difícil, aún más, en estos tiempos de pandemia. “ Tengo que cuidarme mucho, trabajar duro para ir mejorando mis condiciones, pero también cuidar a mi familia”.
En poco más de un año de pandemia ha tenido que aprender a vivir sin el calor de la familia por el aislamiento a que ha tenido que someterse. Está alojada en el Albergue Olímpico junto a un grupo de atletas, observando rigurosos protocolos para evitar el contagio por el coronavirus.
“Este año de pandemia (del coronavirus) ha sido fuerte, muy fuerte”, insiste la miembro de la Fuerza Aérea de la República Dominicana, institución en la que ostenta el rango de Cabo.
Palmarés
Su gran orgullo sería dejar al país una medalla olímpica. Sería la cuarta, porque Félix Sánchez entregó dos medallas de oro en 400 metros con vallas (Atenas 2004 y Londres 2012) y Luguelín Santos una de plata en los 400 metros planos (Londres 2012).
Paulino ha desfilado por exquisitos y exigentes escenarios en su carrera como especialista en lo 400 metros lisos femeninos. También toma parte en eventos de 100 y 200 metros planos, pero su clasificación para Tokio se produjo en los 400 metros.
Antes estuvo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla, Colombia 2018 fue finalista en los 100 metros y estuvo muy cerca de obtener medalla. Terminó en cuarto lugar con marca de 11:39 segundos. Lo mismo sucedió en los 200 metros en los que también estuvo en la final, cruzando la meta con un crono de 22.88 segundos.
En los Juegos Panamericanos de Lima, también estuvo en el pelotón de finalistas y posteriormente fue al Mundial celebrado en Doha y estuvo entre las semifinalistas concluyendo en el puesto 17 entre las mejores 50 velocistas del mundo.
Igualmente, fue el Campeonato Mundial Militar celebrado en China donde conquistó medalla de plata en los 200 metros planos con un tiempo de 23:11 segundos.
Y más recientemente fue la mejor en los 400 metros planos del Festival de Velocidad Isaac Ogando, con un tiempo de 50:31, lo que le validó su clasificación para los Juego de Tokio.
Transición
Paulino fue una atleta con muchas condiciones.
Desde niña estudió en la escuela Alido Paulino de su natal Don Gregorio y allí un profesor de nombre Raulín “vio mi potencial en unas pruebas de salto, hice la mejor marca incluso que los varones”, fue entonces cuando Raulín la presentó al profesor Heriberto Anglón García y la entrenadora Wilady Guerrero.