En nuestro país es más que evidente la falta de comprensión de que estamos en una epidemia con cientos de muertes, miles de afectados y hospitales en proceso de colapso.
Mientras ADP dice que no hay condiciones para clases virtuales, los médicos de Santiago le están sugiriendo a la gente que se pongan en cuarentena, porque si adquieren Covid-19 no hay camas en clínicas ni hospitales.
¿Por qué es tan difícil ver lo obvio?
Para lo que no hay condiciones es para las clases presenciales, con más de 40 mil casos de CORONAVIRUS. Hay tiempo para mejorar lo necesario y poder impartir las clases virtuales.
Nuestros gremios se están poniendo en contra del sentido común que pone en riesgo la salud de maestros, niños y adolescentes.
Los maestros deben ser mentalmente flexibles en esta epidemia que causa estrés y preocupación por la salud propia y la de los familiares.
Debemos ser flexibles y creativos y proteger la mayor cantidad de vidas, ya que los espacios cerrados son de alto riesgo para la transmisión del virus.
Lo más recomendable sería mantenerse en cuarentena voluntaria en la familia, para evitar contagios. Las autoridades están pasivas. Hay que tomar medidas individuales para protegerse.
