El empresario estadounidense Elon Musk prestó dinero al director de cine Jordan Walker-Pearlman y su esposa, Elizabeth Hunter, para que compraran la casa del fallecido actor Gene Wilder, que interpretó a ‘Willy Wonka’. No obstante, cuatro años después la pareja tiene que abandonar la vivienda, informa The Wall Street Journal.
En 2020, cuando Musk comenzó a vender sus propiedades, puso a la venta la casa de Wilder —tío de Walker-Pearlman— en Los Ángeles por 9,5 millones de dólares. La vivienda había sido propiedad de un fideicomiso asociado al empresario desde 2013. Por aquel entonces, el cineasta, que quería comprar la casa donde pasó su infancia, llegó a un acuerdo con Musk y el multimillonario le prestó 6,7 millones de dólares para su compra.
Sin embargo, las huelgas de actores y guionistas del año pasado en Los Ángeles afectaron la situación financiera de la pareja e hizo imposible que pudiera hacer frente a los pagos del préstamo. Como resultado, según el acuerdo, el prestamista puede forzar la venta de la propiedad en un plazo de 90 días desde el momento en que la pareja haya presentado una notificación de impago. El fideicomiso de Musk decidió hacerlo. Sin embargo, la pareja aún puede vender la casa y pagar la deuda por su cuenta, por lo que ya ha puesto a la venta la propiedad por 12,95 millones de dólares.
El matrimonio dijo estar agradecido con Musk y que no guarda ningún rencor. Walker-Pearlman aseveró que el empresario podría haber vendido la casa “mucho más caro”. “Elon nos dio una oportunidad mágica. No tengo ninguna queja“, declaró el director, añadiendo que no hubo “ninguna tragedia” en la situación de desahucio y que Musk no es “mezquino”. Según el cineasta, la pareja ya tiene “una deuda espiritual” con el empresario y se mostró feliz de haber cerrado un capítulo “hermoso” de su vida, y afirmó que ha cumplido su sueño de restaurar la vivienda y mostrarla a su esposa.
