Los Ángeles
(EE.UU.). -El
príncipe Harry y la duquesa de Sussex, Meghan Markle, anunciaron este martes la
serie documental “Heart of Invictus”, que será el primer proyecto
para Netflix de su compañía audiovisual, Archewell Productions.
“Heart of Invictus” seguirá los pasos de un grupo de miembros de las
Fuerzas Armadas que sufrieron accidentes o que padecen enfermedades y que ahora
tratan de llegar a los Juegos Invictus, una competición promovida por el
príncipe Harry para militares con discapacidades o lesiones.
El príncipe Harry será productor ejecutivo de “Heart of Invictus” y
también aparecerá en pantalla en un rol todavía por determinar en este primer
proyecto para Netflix de Archewell Productions.
El director Orlando von Einsiedel y la productora Joanna Natasegara, que
ganaron el Óscar al mejor cortometraje documental por “The White
Helmets” (2016), tomarán las riendas de esta serie.
“Desde los primeros Juegos Invictus en 2014, supimos que cada competidor
contribuiría a su excepcional manera para formar un mosaico de resiliencia,
determinación y resolución”, indicó el príncipe Harry en un comunicado.
“Esta serie aportará a las comunidades de todo el mundo una ventana a las
historias conmovedoras e inspiradoras de estos competidores”, añadió.
El jefe de contenidos de Netflix, Ted Sarandos, aseguró este martes que
Archewell Productions está desarrollando “un ambicioso catálogo” que
refleja los valores y las preocupaciones de Harry y Meghan.
“Desde el momento en que los conocí, me quedó claro que los Juegos Invictus tienen un lugar muy especial en sus corazones y yo no podría estar más feliz al ver que su primera serie para Netflix mostrará eso al mundo de una manera que nunca se ha visto antes”, agregó.
Desvinculados de la vida monárquica, el príncipe Harry y su esposa viven en California (EE.UU.) desde la primavera de 2020 y, además de su colaboración con Netflix, también han probado suerte en la radio con el pódcast Archewell Audio en Spotify.
Los duques de Sussex fueron los protagonistas de una gran polémica en marzo cuando, en una entrevista en CBS con Oprah Winfrey, Meghan acusó a la Casa Real británica de racismo, señaló al Palacio de Buckingham por perpetuar mentiras sobre Harry y ella, y admitió que tuvo pensamientos suicidas por la presión que sufrió.