Desde el Pentágono este jueves han confirmado que el asesinato del mayor general Qassem Soleimani fue realizado “bajo la dirección del presidente”, Donald Trump, como una medida “defensiva decisiva para proteger al personal de EE.UU. en el extranjero” y “disuadir futuros planes de ataque iraníes“.
En EE.UU. acusán a Soleimani de “desarrollar activamente planes para atacar a los diplomáticos y miembros del servicio estadounidenses en Irak y en toda la región”.
Otra víctima del bombardeo fue el jefe de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) y comandante de la milicia Kataib Hezbolá (KH), Abu Mahdi al Muhandis.