Cuatro personas fallecieron y al menos siete resultaron heridas como consecuencia de un ataque de Ucrania contra un autobús en la ciudad de Nóvaya Kajovka, en la provincia rusa de Jersón, comunicó el gobernador local, Vladímir Saldo.
“Estos ataques bárbaros son terror selectivo contra residentes civiles“, afirmó el funcionario en su canal de Telegram, agregando que los militares ucranianos usaron morteros de 120 mm para perpetrar el bombardeo.
“El día de hoy se ha convertido en una evidencia más de la crueldad y la inhumanidad de los militantes de Kiev y sus cómplices de la OTAN“, añadió Saldo.
El gobernador señaló que los “médicos están haciendo todo lo posible” para salvar a los heridos. Además, se están estableciendo las identidades de las víctimas mortales, con cuyas familias se realizará “todo el trabajo necesario de apoyo”. Asimismo, el funcionario expresó su pésame a las familias de las víctimas y prometió que “los culpables tendrán un castigo”.
El Comité de Investigación de Rusia ha lanzado una pesquisa sobre el ataque. “El enemigo bombardeó la localidad de Nóvaya Kajovka con el uso de un proyectil supuestamente con una ojiva de racimo“, comunicó el organismo.
Se detalla que el impacto tuvo lugar cerca de una parada de transporte público y “cuatro civiles resultaron muertos y al menos 12 personas más resultaron heridas de diversa gravedad”, mientras el organismo está determinando el número exacto de víctimas.