Santo Domingo, RD.- Existen películas de culto por su calidad formal. Son aquellas cintas que han adquirido alguna clase de seguimiento popular; ya sea por su formato, producción, trama o significado histórico. Poseen ideas polémicas o presentan contenidos visuales alejados de convencionalismos estéticos o narrativos. Este es el caso de “La naranja mecánica”(1971), una joya de la cinematografía mundial.
Este filme producido en el Reino Unido, pertenece al género de ciencia ficción y fue dirigida por uno de los grandes directores de todos los tiempos, Stanley Kubrick. Se inspira en la novela de Anthony Burgess publicada en 1962. Está ambientada en la Inglaterra de 1995 pero vista desde el 1965. Sigue la vida de Alex DeLarge (Malcolm McDowell) un joven que prefiere la música clásica, tener sexo y llegar a ser ultraviolento junto a los integrantes de su pandilla llamada “Los Drugos”.
Estos antisociales hacen todo tipo de desmanes, fechorías y abusos, sin importar a quien. El azote a la ciudad y la irreverencia hacia sus semejantes los convierten en verdaderos sociópatas.
Un día, sus amigos lo denuncian a las autoridades y es sentenciado a varios años de cárcel. Con la idea de salir de prisión bajo libertad condicional se somete al llamado tratamiento Ludovico, una terapia experimen tal de aversión desarrollada para detener el crimen. El tratamiento consiste en ser expuesto a formas extremas de violencia, forzándolo a mirar escenas que le causa pavor. Alex no apartar la mirada de la pantalla; ya que su cabeza está inmovilizada y sus párpados están siempre abiertos por un par de ganchos atado a sus ojos. Antes de ver las escenas, previamente es drogado para que pueda asociar estas violencias con el dolor que éstas le provocan.
De esta forma, este tratamiento lo deja incapaz de ser violento ni siquiera en defensa propia. Desanimado, deambula por las calles y se encuentra con las antiguas víctimas, y estas comienzan a cobrar venganza.
La película se caracteriza sus perspectivas y audacias formales. Acelera o disminuye el tiempo narrativo, utiliza música electrónica para adaptarla al momento de cada escena; y así darles un carácter más loco o esquizofrénico a través de un ritmo muy dinámico.
Cuando se estrena la película en Inglaterra, sucedieron una serie de crímenes perpetrados por jóvenes influenciados por la obra, esto conllevó a Kubrick a solicitar al Warner que la retirara de los cines para evitar enfrentamientos. Con el tiempo, propuso una nueva fecha de estreno cuando él falleciera, y así sucedió. Un año después de su muerte ocurrida en 1999, fue re-estrenada en Londres.
Hay que destacar la actuación de Malcolm McDowell en lo que se considera como el papel de su vida. Incluso, se ha llegado a despreciar por su violencia y la libertad con que realiza sus actos. Los decorados contienen figuras que destacan elementos visuales, tales como: Pene gigante, máscaras de narices abultadas, pestañas decoradas; además de valerse de otros recursos en la toma de imágenes como violentos zooms de cámara; con cámaras al hombro y una edición muy elaborada.
Ese gran pensador francés Jean – Jacques Rousseau expresaba que el ser humano es bueno por naturaleza y que el medio lo contamina, mientras que otros autores plateaban lo contrario como Maquiavelo, para quien el hombre es intrínsecamente perverso y hace cosas buenas por necesidad, dando lugar a un debate de la condición humana sobre su comportamiento a través de la historia.
Esta película fue nominada a cuatro Premios Oscar: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Adaptado y Mejor Edición. No ganó ninguno, sin embargo quedó marcada por una generación de cinéfilos que hoy estudian en diversas Academias.
DE INTERÉS
Curiosidades: La película fue calificada X en su estreno original en los Estados Unidos. Más tarde, Kubrick cortó voluntariamente 30 segundos para su re-estreno, entonces se calificó como R.
Se interpreta que cuando Burguess se encontraba en Malasia el vocablo “orange” en realidad proviene de “ourang” que en lengua nativa malaya significa hombre. Por lo tanto, su título en traducción simple vendría siendo “El Hombre Mecánico”.
Cuando Alex salta por la ventana para terminar su tormento, el espectador ve el suelo viniendo hacia la cámara hasta la colisión. Este efecto se logró tirando una cámara por la ventana, con el objetivo apuntando hacia abajo.
El doctor que aparece al lado de Malcolm McDowell durante la escena del tratamiento, colocando solución salina en los ojos forzadamente abiertos, era un galeno real que previno que los ojos del protagonista se secaran.
Malcolm McDowell sufrió varios inconvenientes durante las grabaciones del filme, entre ellos, un daño en la córnea mientras grababa las escenas del Tratamiento Ludovico.