La Terapia Familiar Sistémica, por sus diversos enfoques, ve al individuo en un contexto y en relación con los demás y una historia familiar que lo guía, por reglas invisibles a actuar de maneras que afectan su matrimonio, relación con los hijos y sus relaciones de amistad y vida social.
La lealtad familiar puede retrasar planes personales como el matrimonio y desarrollo social y económico.
Por las creencias y cosmovisión de la familia, por el manejo emocional familiar y por las pautas que guían a los individuos que provienen de determinado sistema familiar.
Con la Terapia Familiar se pueden tratar no solo los problemas familiares y de pareja, también comportamientos individuales que son influenciados por la historia familiar.