El último reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revela que más de la mitad del territorio mexicano, el 55,4 %, padece sequía de moderada a excepcional.
Uno de los temas principales de las próximas elecciones presidenciales mexicanas del próximo 2 de junio es el acceso al agua potable, en un país azotado por una grave crisis hídrica que está teniendo impactos en la actividad económica.
De norte a sur de este enorme país, se han vuelto habituales la escasez, los cortes programados, lo que ha desatado manifestaciones callejeras de gente cada vez más indignada que reclama el derecho al agua potable.
El último reporte del Monitor de Sequía de México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revela que más de la mitad del territorio mexicano, el 55,4 %, padece sequía de moderada a excepcional.
Un consecuencia de ese déficit es el hecho de que México suela estar en las primeras posiciones de consumo de agua embotellada.
La precandidata presidencial del oficialismo de México, Claudia Sheinbaum, quien aspira a sustituir al izquierdista Andrés Manuel López Obrador, expuso hace unas semanas su visión sobre la crisis hídrica, cuya solución pasa por hacer un uso eficiente y crear nuevas fuentes de abastecimiento.
“Evitar la deforestación”
“Para disminuir sequías por supuesto hay que evitar la deforestación, los bosques generan evapotranspiración y eso genera lluvias”, explicó la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México y abanderada de la alianza izquierdista Sigamos Haciendo Historia.
“Hay otra parte que es difícil controlar que tiene que ver con los cambios climáticos”, agregó.
Por la candidata opositora Xóchitl Gálvez, senadora con licencia y representante del frente conservador Fuerza y Corazón por México, aseguró hace días en el estado de Chihuahua que el norte mexicano está viviendo su peor sequía de los últimos 50 años y pidió un diálogo nacional para buscar soluciones.
“Hagamos un diálogo nacional para resolver el tema del agua. Yo no digo que quiten agua a los otros estados. Lo que sí digo es que asignen recursos para mejorar el campo. Urge, con esta sequía, que todos los estados tecnifiquen su campo”, declaró.
El problema con el agua en México no es debido solo a un suministro insuficiente, sino a una gestión deficitaria de los recursos existentes y una infraestructura deficitaria.
La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) de 2022, citada en un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), revela que el 33 % de las viviendas con acceso al agua carecen de suministro diario, lo que implica que muchos habitantes deben incurrir en gastos imprevistos, como la instalación de sistemas de purificación o pagar por pipas para agua.
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“Falta planeación”
La escasez de agua y su suministro intermitente pueden ser un lastre para las empresas internacionales que quieran abrir operaciones en México.
El también candidato opositor Samuel García, gobernador de Nuevo León, advirtió que “la falta de agua” podría hacer perder muchas oportunidades en el ‘nearshoring’ (deslocalización cercana de operaciones comerciales a un país vecino).
La semana pasada, un encuentro de expertos ambientales urgió a las autoridades a regular el uso del agua ante la llegada de grandes empresas al país, como la estadounidense Tesla, que quiere instalar una planta de ensamblaje.
“Falta planeación, tiene que haber un tema claro. Tiene que haber una política pública que acompañe todo esto. No solamente darle la concesión a Tesla o la empresa que quieras para extraer tantos metros cúbicos al año, sino que tiene que acompañarse con una guía de desarrollo urbano”, señaló Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua A.C., citado por medios locales.