La decisión llega tras la polémica en la que se vio envuelta por utilizar su estatus real en el título de una gira realizada con su novio, el chamán estadounidense Durek Verrett.
La princesa Marta Luisa de Noruega ha renunciado a utilizar su título real con fines comerciales tras la polémica que estalló a primeros de año por esta cuestión, según lo anunció el pasado miércoles a través de su cuenta personal en Instagram.
Marta Luisa realizó una gira de charlas junto a su novio Durek Verrett, un chamán estadounidense, bajo el título de ‘La princesa y el chamán’, en la que prometía llevar a los asistentes “hacia un autodescubrimiento en la sabiduría para revelarles su divinidad autoactivada”.
“Mayor libertad”
En la publicación la princesa reconoce que usar su estatus real en esa situación fue “un error” y dijo sentirlo profundamente. Asimismo, reveló que ha acordado con su familia que cuando se trate de un contexto comercial, a partir de ahora se referirá a sí misma como simplemente Marta Luisa, sin hacer alusión a su título de princesa, que usará color cuando represente a la Casa Real de Noruega o en contextos privados.
“He creado espacio para una mayor libertad en mis actividades comerciales”, puntualizó la mujer, que a sus 47 años es la cuarta en la línea de sucesión al trono noruego, por detrás de su hermano menor y sus dos sobrinos.
La mujer estuvo casada durante 14 años con el artista Ari Behn, con quien tiene tres hijas, pero se divorciaron en 2016. El pasado mes de mayo anunció en Instagram su nueva relación con Verrett, al que definió como su “alma gemela”.