El Congreso de Perú aprobó el otorgamiento de una pensión vitalicia al expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), quien fue liberado en diciembre del año pasado tras un controvertido indulto humanitario.
“En consecuencia y luego de la verificación antes mencionada, la solicitud sobre pensión para expresidentes constituciones de la república […] presentada por el señor Alberto Fujimori resultaría procedente”, reza un documento del Departamento de Recursos Humanos del Parlamento con fecha del 10 de julio.
Ya en mayo trascendió a la prensa que Fujimori había pedido al Congreso una pensión de 15.600 soles (poco más de 4.000 dólares), la asignación de agentes de seguridad del Estado y el pago de gastos por combustible.
25 años de prisión
Fujimori, que fue condenado a 25 años de prisión en 2009 por crímenes de lesa humanidad por las matanzas en los años 90 en La Cantuta y Barrios Altos, fue liberado tras 16 años de cárcel por orden del Tribunal Constitucional.
Además, Fujimori todavía adeuda 57 millones de soles (alrededor de 15 millones de dólares) de reparación civil por los tres casos de corrupción en los que ha sido condenado.
El diario El Comercio recuerda que la pensión vitalicia se aprobó a pesar de que el indulto humanitario no le declara inocente de las sentencias dictadas en su contra y que en noviembre del 2000 fue vacado por el Congreso.
A mediados de julio, Keiko Fujimori, hija del exmandatario, anunció que su padre buscaría gobernar nuevamente la nación andina. “Mi padre y yo hemos conversado y decidido juntos que él será el candidato presidencial”, comunicó.