Las personas que duermen con sus mascotas tienen un sueño de peor calidad y más síntomas de insomnio que las que no lo hacen.
Un grupo de investigadores del Trinity College (EE.UU.) reveló que dormir con un perro en la misma habitación podría influir negativamente en la calidad del sueño de las personas, informó este miércoles el portal The Conversation.
Las relaciones entre humanos y animales están presentes en todas las facetas de la sociedad moderna. Según estimaciones, alrededor del 56 % de la población mundial tiene al menos una mascota en sus hogares, siendo Latinoamérica la región líder. Anteriores investigaciones han demostrado que las mascotas contribuyen a reducir el riesgo de enfermedades de sus dueños y a aumentar su bienestar.
Esto se debe a la influencia que pueden tener los animales en las rutinas de las personas, incluyendo los patrones de sueño. No obstante, los efectos concretos de dormir con nuestras mascotas no se habían analizado con detalle hasta el momento.
Pensión de 40 euros al mes: perro sale victorioso del divorcio de sus dueños
Un estudio recientemente publicado en la revista Scientific Reports descubrió que las personas que duermen con sus mascotas tienen una peor calidad del sueño, así como síntomas de insomnio, en comparación con aquellas que no lo hacían.
¿Es mejor dormir con perros o con gatos?
Los investigadores también encontraron evidencia de un efecto negativo sobre el sueño cuando se duerme con perros, aunque no se halló lo mismo en personas que duermen con gatos. Estos resultados se obtuvieron luego de evaluar los hábitos de sueño, la calidad percibida del sueño y la gravedad del insomnio de aproximadamente 1.500 adultos estadounidense, la mitad de los cuales dormían con sus mascotas.
El 93 % de las personas que participaron en el estudio aseveraron que sus mascotas tenían un efecto positivo en su calidad del sueño. Sin embargo, pese a que algunos participantes aseguraron que dormir con sus mascotas les brindaba una sensación de seguridad psicológica o de comodidad, eso podría no ser realmente así.
El inconveniente de dormir con animales se debería a que la capacidad de los humanos para mantener un sueño continuo y profundo durante la noche podría verse alterada al momento de dormir con sus mascotas, puesto que estas pueden actuar como fuente de ruido y calor.
Los autores del estudio admitieron que, aunque es necesario realizar más investigaciones, los recientes hallazgos podrían indicar que la mayoría de las personas desconocen los posibles efectos negativos que sus mascotas pueden tener en su sueño.
