El sistema financiero debe acercarse más a las regulaciones internacionales.
Santo Domingo, RD.-La Superintendencia de Bancos (SB) informó que trabaja en lo que define como una “ruta crítica” para la actualización del sector financiero en el cumplimiento de los estándares prudenciales, como ha sugerido el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su más reciente informe sobre la economía dominicana.
El FMI reconoce que los bancos dominicanos están bien supervisados por las autoridades, pero sugirió que se acerquen más a las normas prudenciales internacionales. Al respecto, la Asociación de Bancos Múltiples (ABA) expresó su disposición de trabajar junto a las autoridades monetarias para alcanzar los estándares de los principios de Basilea II yIII. Los mayores avances de cumplimiento están todavía en los principios de Basilea I.
“Actualmente, nuestros técnicos trabajan de la mano de expertos internacionales -y con asistencia técnica del propio FMI- para la plena adopción de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF)”, informó la Superintendencia de Bancos.
La institución que dirige Alejandro Fernández Whipple agrega que también se busca cumplir con los lineamientos prudenciales de Basilea II y III y las mejores prácticas en prevención de lavado de activos (PLAFT) y protección de los consumidores.
Lo que advierte el FMI
En su reciente informe sobre la economía dominicana, el Directorio Ejecutivo del FMI plantea: “Los directores coincidieron en que, si bien el sistema financiero sigue siendo resiliente y está bien supervisado, se beneficiaría de acercarse a las normas internacionales de supervisión y regulación y de mejorar el conjunto de herramientas macro prudenciales y de gestión de crisis”.
Esta observación del FMI ha causado movimientos en el sector financiero como entre las autoridades monetarias encargadas de hacer cumplir las normas de referencia.
Puso de ejemplo los manuales de Contabilidad de Requerimientos de
Información, que están en consulta pública.
Otros módulos de su plan, “sobre los que compartiremos detalles en el momento
oportuno”, se coordinan de manera interinstitucional con el Banco Central y la
Junta Monetaria, que es el órgano regulador.
Las entidades del sistema financiero reconocen que deben cumplir las normas prudenciales internacionales, pero que es una labor conjunta que depende en gran medida de las autoridades reguladoras.
La Superintendencia de Bancos informó que cerrar las brechas regulatorias “es un objetivo clave de nuestro plan estratégico”, que contempla la estabilidad macroprudencial y la integridad del sistema financiero como ejes fundamentales.
Esto supone un enfoque estricto en iniciativas para preservar la estabilidad, solvencia y eficiencia del sistema, mejorar la supervisión del cumplimiento de normas antilavado y promover la disciplina a través de información y de un régimen sancionador efectivo.
